El vicepresidente y consejero delegado de CaixaBank, Juan María Nin, intervinó el pasado día 14 de marzo en DeustoForum, con la conferencia “Retos y oportunidades del nuevo entorno económico”, que se enmarca dentro del ciclo “Hacia la salida de la crisis: ¿Cómo? ¿En qué condiciones” que venimos organizando.
Durante su exposición, Nin destacó que “la recuperación económica será muy gradual y rodeada de riesgos, tanto internos como externos”. Para el consejero delegado de CaixaBank, antiguo alumno de la Universidad de Deusto, entre los principales riesgos internos que hay que afrontar para apuntalar la recuperación se encuentra el paro y, especialmente, el paro juvenil. Para Nin, los actuales niveles de paro no son soportables y, además, “la revitalización del mercado laboral es clave para reforzar la demanda interna”.
Otro riesgo interno es el crecimiento de la deuda pública, que ha pasado del 36% del PIB en 2007 al 94% en 2013. Este nivel de deuda se traduce que, en 2013, el Estado tuvo que pagar 35.000 millones de euros en intereses, equivalente al 3,4% del PIB.
El consejero delegado de CaixaBank también aportó cifras positivas para mostrar que hay capítulos que están mejorando. Entre ellos, destacó la reducción del déficit fiscal, que ha pasado del 11,1% del PIB en 2009 al 6,7% en 2013; el crecimiento interanual en creación de empleo que se produjo en febrero, y que es el primero desde mayo de 2008; o la gran corrección de la balanza por cuenta corriente, que ha pasado de un déficit de 105.000 millones de euros (10% del PIB) en 2007 a un superávit de 7.000 millones de euros en 2013 (0,7% del PIB).
Para Juan María Nin, las reformas que se han llevado a cabo están produciendo resultados, “pero un exceso de confianza podría frenar los avances que se están consiguiendo”. Por esta razón, animó a seguir avanzando en las reformas y en la reducción de los desequilibrios.
En cuanto a los riesgos externos de la recuperación económica, el consejero delegado de CaixaBank mencionó las estrategias de salida del programa de flexibilización cuantitativa, que suponen un riesgo global, y la disminución del ritmo de compras (tapering) que afectará a los mercados emergentes y al conjunto de la economía mundial. Otros riesgos a los que se refirió Juan María Nin fueron la fortaleza del euro, la implementación de la unión bancaria, la inflación demasiado baja en la zona euro y la crisis en Ucrania.