Descripción

El Mediterráneo ha sido un espacio fundamental en el desarrollo de nuestra esencia europea. Frontera y canal de encuentro entre realidades cada vez más distanciadas, sus orillas construyen una geopolítica complicada por las grandes asimetrías sociales, políticas, religiosas y económicas.Es aquí donde el sacudido Oriente, el inestable Magreb y el agitado Sahel se encuentran con Europa. La división entre las orillas norte-sur es una discontinuidad de tal magnitud que genera un convulso gradiente de emigración, inseguridad y situaciones conflictivas: terrorismo, crisis migratorias, conflictividad religiosa,… Europa se siente cada más vulnerable y necesita reflexionar, posicionarse y actuar decididamente para salvaguardar sus valores.