Descripción

El escenario actual en el que se desenvuelve el sistema financiero es, no sólo complicado, sino inédito en muchos aspectos.  Por primera vez en la historia la banca se enfrenta a tipos de interés negativos, lo que reduce sus márgenes y hace muy difícil incrementar los ingresos. Además, este escenario ha venido para quedarse durante un tiempo.

Preferentes, cláusulas suelo, tarjetas black, el rescate… La imagen de la banca española se ha deteriorado notablemente en los años de crisis y todo el sistema necesita mejorar su reputación y recuperar la confianza del cliente.

Por si esto no fuera suficiente, la tecnología y los cambios de hábito de los clientes fuerzan a las entidades a una transformación digital y hacer un uso masivo de los canales digitales. Esto constituye una oportunidad para reducir los costes pero es al mismo tiempo un gran reto, puesto que permitirá la irrupción en el mercado financiero de nuevos competidores como las grandes empresas tecnológicas.

Y es que las entidades que no sepan adaptarse “desaparecerán en los próximos cinco o diez años”, tal y como ha señalado en más de una ocasión Francisco González, presidente de BBVA.